Marruecos es un país que cautiva a los amantes de la imagen. No es casualidad que hasta aquí viajaran algunos de los grandes pintores del pasado, como Eugene Delacroix, Henri Matisse o Mariano Fortuny, y quedaran fascinados por la luz y el colorido que inundan sus paisajes y escenas cotidianas. Y los amantes de la fotografía actual tampoco pueden resistirse al magnetismo de este país tan fotogénico. Por ello, en este post te contamos cuáles son los mejores destinos fotográficos en Marruecos y, además, te damos una buena noticia: Chic Morocco puede organizar un viaje centrado en esta actividad, a cargo de un experto en la materia y con todas las comodidades premium para los participantes.
En qué consisten estos viajes fotográficos
Los viajes fotográficos que organizamos en Marruecos siguen un itinerario parecido al de muchos circuitos generales, pero tienen la particularidad de que el hilo conductor de todo es la actividad fotográfica. Es decir, la búsqueda de lugares y situaciones ideales para capturar la mejor imagen, ya de paisajes o de la población local. Al mando de dicho viaje está un fotógrafo profesional que, además de dar consejos sobre técnicas y equipos, conoce al dedillo el país, así como los rincones más adecuados para inmortalizar.
Por ello, los participantes viajan con sus equipos fotográficos, que pueden incluir trípodes, teleobjetivos y otros accesorios, además de la cámara. Y además, el programa de viaje se caracteriza por llevar otro ritmo más calmado que el de la mayoría de viajes programados, puesto que para capturar la imagen perfecta se necesita, sin duda, una alta dosis de paciencia.
Lista de destinos fotográficos en Marruecos
La lista de destinos fotográficos en Marruecos es, sencillamente, infinita, pues cada rincón destila un encanto especial y a cada momento se producen escenas llenas de autenticidad. Pero si hubiera que elegir los más destacados, sin duda no podríamos prescindir de los siguientes:
Las dunas del desierto
Los campos de arena fina y dorada tienen un magnetismo especial, con una paz y una energía sin igual. Y una buena fotografía puede capturar esa esencia, sobre todo si se sabe combinar la sutileza que adquieren las formas de estos montículos arenosos y la mágica luz que modifica los colores del cielo, especialmente al atardecer y al amanecer. Los tres campos de dunas más famosos en Marruecos son los ergs de Merzouga, Chigaga y Ouzina.
Las kasbahs de los valles presaharianos
Si las dunas son la viva imagen del desierto más puro, en los valles y oasis que conducen hasta el Sahara también encontrarás un ambiente propicio para la fotografía. De clima y ecosistema árido, en este caso en forma de hammada (terreno pedregoso), aquí se erigen kasbahs (castillos bereberes), unos bien conservados y otros (la mayoría) en ruinas. Y ya se sabe que las fortalezas y las construcciones en ruinas en medio de la naturaleza siempre dejan instantáneas llenas de fuerza.
Las Gargantas del Todra
Pero no siempre hay que buscar la mano del hombre en la naturaleza para conseguir fotografías llenas de fuerza. La naturaleza misma, por medio de la erosión, es capaz de brindarnos rincones de lo más fotogénico. En este sentido, destacan las Gargantas del Todra, un espectacular cañón labrado por el río de dicho nombre, dando como resultado pareces verticales de imponente altura y belleza.
Las medinas históricas
La medina es el casco antiguo de las ciudades marroquíes, y aquí la atmósfera es especialmente fotogénica, pues la vida sigue siendo muy auténtica en ellas. Tiendas de artesanía, carnicerías halal, mercadillos con puestos de especias y otras situaciones llenas de tipismo representan el sueño de cualquier fotógrafo interesado en los aspectos más sociales de la fotografía, tanto a color como en blanco y negro. Marrakech y Fez son dos de las más adecuadas para ello.