Consejos útiles

Como te contamos en la página sobre Geografía, clima y épocas para viajar, el clima de Marruecos es un factor a tener muy en cuenta a la hora de organizar tu viaje. Por ello, algunos de los consejos más importantes que te podemos dar antes de partir están relacionados con ello:

• Protégete del calor: en verano e incluso en los momentos más cálidos de la primavera, deberás estar preparado para las altas temperaturas. Tener un abanico a mano o algún artilugio que produzca aire te ayudará a calmar la sensación de calor. Además, las prendas de ropa deberían ser largas (como veremos a continuación) pero finas y transpirables para disipar el calor generado por el propio cuerpo. En este sentido, los tejidos de algodón son ideales, o aquellos de carácter sintético que se comporten de forma similar
• Protégete de la radiación solar: esto va aparejado al calor, puesto que la radiación solar suele ser mayor en verano y en las áreas más cálidas, pero no siempre: siempre habrá que tener este peligro presente en cotas elevadas del Atlas, en las costas (por la tentación de permanecer a piel descubierta) y en los días despejados del desierto, que son casi todos. Además, la protección frente a la radiación solar implica una serie de medidas específicas:
  • Usar crema con factor solar SPF 50, y renovarla cada dos o tres horas (según las recomendaciones del fabricante)
  • Usar gafas de sol, incluso si tienes ojos oscuros, a ser posible con cristales polarizados que también protejan frente a la radiación rebotada. Esto último es especialmente importante si estás en un entorno de nieve en el Atlas o si el mar se extiende frente a tus ojos
  • Cubrir la piel con ropa larga pero ligera y transpirable. También puede ser útil el uso de pañuelos finos sobre los hombros. Algunas prendas técnicas están certificadas por su capacidad de protección solar, así que también serán una buena opción
  • Usar prendas que protejan la cabeza: son válidas las gorras o los sombreros. Pero si quieres sentirte como un nómada más en el desierto, puedes usar un turbante marroquí
• Hidrátate bien: si viajas a Marruecos en temporada cálida, es probable que sudes más de lo habitual. No solo en las áreas costeras, donde la humedad es muy marcada, sino también en el desierto, donde la humedad es ínfima pero el calor puede llegar a ser sofocante. Por ello, es recomendable llevar siempre agua encima, incluso aunque pueda quedarse caliente y poco apetecible: el agua caliente o a temperatura ambiente siempre será mejor que no tener agua. Y el agua siempre es más aconsejable que los refrescos azucarados con burbujas  puesto que son más efectivos para quitar la sed, aunque las bebidas isotónicas para deportistas también pueden ser una buena idea para reponer energía y sales minerales, que se pierden por vía del sudor. Una recomendación que hacen los expertos es beber de manera habitual, antes incluso de tener sensación de sed, puesto que esto último, en casos extremos, puede ser la antesala de un episodio de deshidratación
• Refréscate de vez en cuando: si el calor es sofocante y prevés una cierta exposición al sol, se aconseja refrescarse la cara, la cabeza y el cuello con agua, ya sea en una fuente, un lavabo o con un difusor de agua de tipo spray. Si recurres a ello con agua de un manantial no tratado, asegúrate de lavarte las manos después con una solución hidroalcohólica y desinfectante
• Protégete del frío: este parece uno de los consejos de viaje más contradictorios, pero nada más lejos de la realidad. Tan importante como protegerse del calor es hacerlo contra el frío. Por supuesto, si viajas a una zona de alta montaña en temporada de invierno (Alto Atlas, Medio Atlas, Rif), pero también si viajas al desierto, donde las noches pueden llegar a ser realmente gélidas. Por ello, no deberías olvidarte de llevar ropa de abrigo, y más concretamente ropa térmica: prendas finas que mantienen el calor corporal y no ocupan demasiado espacio, puesto que durante el día quizás no te hagan tanta falta. También es una buena elección dotarse de prendas de abrigo locales, a menudo hechas con lana pura y gruesa, que utiliza la población bereber que habita en las áreas más frías, como el Rif
• Protégete del viento: este es un consejo útil si vas a la costa Atlántica. No tiene como objetivo preservar la salud, más allá de la protección de los ojos frente al polvo y la arena que puedan quedar suspendidos en el ambiente. Sin embargo, es una recomendación que te hará disfrutar más de tu estancia en la playa. Para ello, las gafas de sol anchas son de gran ayuda (también contra la radiación solar), al igual que elementos como paravientos y sombrillas especiales, muy difundidas entre la población local y los turistas de este litoral
• Protégete contra las tormentas de arena: si tienes la mala suerte de verte inmerso en una tormenta de arena en el desierto, será muy importante que estés protegido frente a ella. En este sentido:
  • Cúbrete los ojos y la nariz: a este fin son también muy útiles los pañuelos y turbantes, puesto que se pueden llevar de diferentes maneras. También pueden ser muy útiles las mascarillas, tan generalizadas y cotidianas a raíz de la Covid-19
  • Usa gafas de sol: para esto, las mejores son las anchas y ceñidas, de deporte o aventura. Para este objetivo, también pueden ser válidas las gafas de cristales claros, pues en una situación de este tipo la radiación solar deja de ser un problema
  • Refúgiate en el interior de algún edificio y espera a que todo pase: para ello, es importante que el lugar elegido como refugio pueda permanecer bien estanco, cerrando correctamente puertas y ventanas